El Pecado contra el Espíritu Santo puede tener
muchas versiones. En el momento histórico de la vida pública de Jesús vemos lo
que significa. En nuestros días es más sutil. Sucede cuando nos dejamos
convencer de que no tenemos salvación, de que la felicidad de Dios no es para
nosotros, que no somos dignos del amor de Dios. El Espíritu Santo en nosotros
tiene como misión lo contrario. Si, como le dice San Pablo a Tito, no estamos
continuamente reavivando el don de Dios, apagamos el Espíritu y actuamos con la
cobardía del que se sabe vencido. Sucede cuando perdemos el buen juicio espiritual,
perdemos la unidad de vida (andamos divididos) y terminamos atando al Espíritu Santo. No
perdamos la oportunidad de reavivar hoy mismo el don de Dios. Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario