El escriba pregunta “¿Qué tengo que hacer para
heredar la vida eterna?”. Me pregunto si en nuestras mentes esta pregunta es
común o sólo se la hacen algunos. Tal
cual no abunda, pero la podemos reformular por ¿qué tengo que hacer para ser
feliz? Es lo que late en el fondo de esa pregunta. Lo de ir al cielo se ha presentado
durante muchos siglos como el anhelo de justicia y de dicha después de una vida
cruel en manos de los tiranos. El “opio del pueblo”. Pero ese no es el evangelio
que Pablo predicaba. El cielo lo ha ganado Cristo para mí, eso es lo que él
predicaba: que el amor de Dios no se gana, es gratis. Entonces ¿me puedo echar
a dormir? No, porque el cielo no es un premio sino una relación con Dios para
siempre. Y si no vivo la misericordia con el prójimo esa relación está rota. El
billete para el cielo es gratis, pero se pierde si no busco la felicidad
practicando la Misericordia. San Francisco de Borja hoy nos lo recuerda. Feliz día y bendiciones, Para ver las lecturas pincha aquí.
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