martes, 9 de junio de 2015

SEMANA DÉCIMA TO MARTES

Una forma de hacernos sosos, de perder el sabor del Evangelio es la falta de coherencia. Decir un día sí y otro no. Dios no puede negarse a sí mismo y su sí es irrevocable y en Jesús ha dicho sí por él y por la humanidad. Cuando empezamos el día mirando al Señor y dejamos que brille su rostro sobre nosotros y vemos su sí, no podemos decir un no. Su promesa asegura nuestros pasos y no nos puede dominar ninguna maldad. Me acuerdo de una canción: “hacen falta si en el  mundo, hacen falta si al amor…”. Yo hoy renuevo mi sí como cada mañana. Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario