Sansón y Juan son dos israelitas con una misión especial
elegidos desde el seno materno. Pensamos que esta elección no se da en nosotros
y que sólo los que nacen por ejemplo en el seno de la familia real, nacen con
la vida “determinada” van a ser príncipes o reyes. Pues hoy que faltan menos de
siete días para el nacimiento del Salvador, podemos pensar en nuestra
existencia intrauterina, esa fase de nuestra vida en la que vivimos una
relación tan especial con nuestras madres y una etapa en la que Dios ya nos
amaba y nos llamaba para una misión. Puede que nuestra misión en la vida nos
parezca poco importante o insignificante o que no nos la terminemos de creer
como Zacarías al centrarnos en nuestra esterilidad. Cada uno de nosotros hemos
sido elegidos para ser instrumentos de Dios movidos por su Espíritu Santo. Nada
más y nada menos. Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.
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