Al leer la primera lectura, esta maravillosa
lectura, recuerdo que el domingo 4 de diciembre (uno de los puentes) estábamos
preparando la Eucaristía Universitaria y nos decíamos diez minutos antes: “hoy
vamos a estar en familia”. Y puse muy pocas formas en la patena. A las y veintiocho
empezaron a entrar jóvenes, más de treinta. En el ofertorio tuve que entrar en
la Sacristía a por más formas. Nuestros
cálculos suelen ser cicateros y pobres, estamos faltos de esperanza. El Señor
nos invita a ensanchar nuestra tienda y a preparar sitio para los que vayan
llegando. Como ayer, que invitamos a una chica a hacernos una foto y resultó
ser una estudiante erasmus de Chile que estaba buscando una comunidad de
referencia. Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.
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