Lo sencillo es lo más grande. Hoy recordamos a la Virgen María en su presentación en el Templo. Según la tradición sus padres la presentaron al Señor para que se dedicara el culto en el templo. María es una niña pequeñita, como la limosna de esta viuda. Sin embargo en ello se fija el Señor. Lo dirá María cuando conciba en su seno a Jesús: "El Señor se ha fijado en mi humildad". Este gesto de María implica consagración, darse a Dios por entero, dedicarse a él. Nosotros a veces nos damos como calderilla ¿En quien nos fijamos nosotros? ¿En los grandes o en los pequeños? Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.
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