La plenitud del amor es no tener miedo, vencer el temor.
El día de la Epifanía caía en la cuenta de que a veces somos Herodes y nos
estorba Dios. Profundizando en ello me doy cuenta de que Herodes tiene miedo
del Niño Jesús, lo considera una amenaza. Herodes no conocía a Jesús, ni sus
planes. La ignorancia es tremenda, engendra temor. Muchos no conocen a Dios y
le tienen miedo, para ellos Jesús es un fantasma, como los discípulos, que tenían
la mente ofuscada y estaban llenos de estupor. Si en nosotros hay temores y
resquicios de miedo es que no hemos llegado a la plenitud del conocimiento de
Dios, de su amor por cada uno de nosotros. No pasa nada, estamos en camino,
esto es un proceso. ¿qué temores hay en mí? Feliz día y bendiciones. Para ver las lecturas pincha aquí.
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